Encontré este post en el blog Perras Negras y me pareció realmente romántico, divertido, diferente, muy al estilo Amelié.
Aquí os dejo su idea.
"A veces viajo donde me apetece. Invento una dirección en la ciudad que quiera visitar y envía uno carta con una foto mía dentro. Esa carta saldrá y llegará a su destino. El cartero, desconcertado, no encontrará la calle y yo recibiré de nuevo mi carta con un matasellos que asegure mi viaje y una nota que diga que no se ha podido entrar porque la dirección es errónea.
Si Correos supiera de mis viajes…"
0 comentarios:
Publicar un comentario